jueves, 24 de octubre de 2013

El dominio de Apple en el mercado de los tablets está cayendo


Apple debe llevarse el crédito por dos cosas: en primer lugar, por popularizar el mercado de los tablets, logrando crear un dispositivo que se volvió exitoso en forma inmediata. Y en segundo lugar, por haber dominado el sector durante un par de años gracias a las estupendas ventas de la línea iPad. Pero las cosas están cambiando. Tal como sucedió en el mercado de los smartphones hace años, ahora sucede en el de los tablets: Apple está perdiendo el liderazgo lentamente. Los datos más recientes recogidos por la firma IDC indican que la cuota de mercado de la línea iPad es actualmente menor al 30%.

La compañía todavía conserva el primer lugar en cuanto a ventas, pero las mismas han caído en gran medida. El año pasado, por ejemplo, la cuota de mercado de Apple se mantenía por arriba del 40%, mientras que la de Samsung era del 12,4%. Ahora el panorama ha cambiado totalmente: Apple vende menos tablets y la cuota de Samsung ha crecido hasta un 20,4%, según se registró en el tercer cuarto del año.

Debemos tener en cuenta que los precios que maneja la manzana son superior a los de Android además. El iPad Mini básico cuesta $300 dólares, mientras que por $200 dólares y por $230 podemos hacernos con un tablet Nexus o un Kindle de Amazon.
¿Crees que el nuevo iPad Air (en imagen) y el futuro iPad Mini 2 logren inclinar la balanza un poco más en favor de Apple?


lunes, 14 de octubre de 2013

Ecologia de los medios


"La Ecología de los Medios estudia la forma en  que los medios de comunicación afectan la percepción humana, la comprensión, los sentimientos  y los valores; y como nuestra interacción con los medios facilita o impide nuestras oportunidades de supervivencia". Dentro de esta corriente, se encuentran prestigiosos intelectuales como Susan Sontag, Walter Ong y Paul Levinson, entre muchos otros.
El pensamiento de McLuhan representa, en la actualidad, una referencia obligada en el estudio de las comunicaciones digitales, en la teoría de las interfases, en el estudio de Internet, y en las perspectivas abiertas por la Sociedad de la Información.
Recientemente, Scolari propuso una nueva clasificación de las teorías de la comunicación ubicando a la ecología de los medios, entre las teorías generalistas que plantean la construcción de cuadros integradores de todos los procesos que afectan al mundo de la comunicación (2010). Agregamos entonces que, en consecuencia, terminan por afectar, impactar o delinear una cultura. El medio como ambiente, es decir, la ecología de medios siempre estuvo allí desde que se conoce la existencia humana sobre la tierra junto con los procesos comunicativos y los medios, entendiéndolos como vías, para comunicarse:  desde la pintura rupestre hasta el uso de los smart phones, pasando por la imprenta de Gutenberg y sin ánimo de establecer mayores diferencias entre los etiquetados “viejos” y “nuevos” medios que bien podría ser material para otro ensayo. Pero pareciera que siempre hubo más interés por determinar qué es la comunicación y cómo se produce el proceso comunicativo. 


En una sociedad condicionada por múltiples elementos, los medios de comunicación además de las tecnologías aplicadas a estos medios, juegan un papel importante. Las diversas teorías sobre los medios así como su influencia en las personas nos permiten hacer varias reflexiones. 
El afán de las personas de conseguir un orden determinado los lleva a colocar nombres, términos o etiquetas a elementos y signos para precisar espacios y condiciones. 
La frase “ecología de medios” acuñada por Postman permitió abandonar la práctica de referirse al estudio de los medios como ambientes en sentido figurado para darle un lugar en el campo científico y no como una característica más anexada a un estudio esquemático. 


viernes, 11 de octubre de 2013

Cambios en las condiciones de uso de Google y Facebook

Esta semana Facebook y Google anunciaron nuevos cambios en sus los contratos de uso de sus servicios. Hoy Google dio a conocer su nuevo contrato de uso : permite que los contactos de un usuario puedan ver todas sus actividades públicas online. Por ejemplo, si alguien fue a comer a un lugar y le puso cuatro estrellas al restaurant, o dejó un comentario, o hizo clic en el botón +1 en alguno de los servicios, esa información será compartida por Google al resto de los contactos (pero sólo de lo que el usuario hizo proactivamente, es decir, no hay un seguimiento de sus actividades online sino de las acciones sobre un servicio).
Pero además, a partir del 11 de noviembre la compañía pondrá en práctica lo que denominarecomendaciones compartidas : mostrará esos comentarios o respaldos (ese +1 que el usuario le agregó a un aviso, un resultado de búsqueda, una evaluación, etcétera), con el nombre y y la foto de perfil en Google+ del usuario, junto a anuncios publicitarios de ese servicio. Si alguien le dio +1 a un restaurant, o lo calificó positivamente usando una herramienta de Google, los términos de uso habilitan a la compañía a publicar, en un aviso online, el nombre y la cara del usuario como respaldando ese producto.
Esta acción está activa en forma predeterminada; quienes no quieran que Google use esa información deben ir a la herramienta de configuración del perfil de Google+ que desactiva esta función.

Otro es el caso de Facebook, que en un nuevo cambio de sus políticas de privacidad dio de baja una opción vigente hasta ahora, y que anula la posibilidad de que un usuario no aparezca en las búsquedas dentro de la red social. Hasta hoy, los usuarios podían elegir si querían que otros usuarios pudieran encontrarlos buscando sus nombres dentro de la red social.
Si bien, esta opción ya había sido retirada de la configuración de privacidad de los perfiles en diciembre pasado, todavía seguía vigente para aquellos que habían optado voluntariamente permanecer ocultos de las búsquedas públicas dentro de Facebook. A partir de hoy, los aspectos públicos de todos los perfiles serán visibles a todos los usuarios.
Lo que sí pueden hacer los usuarios es restringir quién ve lo que publican -en cada actualización de su perfil- pero no hay un botón que permita fácilmente reducir en forma general la visibilidad de un usuario dentro de Facebook.
De esta manera, la red social extiende las funcionalidades y herramientas del Graph Search , el buscador que permite encontrar personas, temas afines y grupos dentro de Facebook.

viernes, 4 de octubre de 2013

La ira tecnológica: ¿cómo reaccionás cuando tu PC no te responde?

Cuántas veces quisiste tirar tu celular por la ventana porque no te respondía a la velocidad que querías. Cuántas veces te pasó lo mismo con tu PC o tu notebook. Bueno, no eres el único. Al parecer, esta ira que invade a los usuarios de la tecnología es algo más extendido de lo que pensamos.
Según una encuesta realizada por SanDisk a ocho mil usuarios de PC en algunos países de Europa, EE.UU y China, el tiempo que se pierde esperando que una computadora se inicie o corra correctamente un programa tienen consecuencias, en algunos casos, algo funestas. Por ejemplo: los usuarios de España perdieron casi 5 días de sueño en lo que va del año esperando que la computadora ejecute un pedido, mientras que en Italia este número asciende a casi 7 días por año,según publica The Telegraph en Inglaterra .
Y si bien esto no sería tan grave, por lo menos desde el punto de vista de los usuarios, la encuesta arroja que casi un tercio de los encuestados tiene problemas de sueño por este inconveniente. Y, como si esto no podía ser peor, este malestar se replica durante el día, modificando el humor de los usuarios de PC. Según el informe, el 37% de los encuestados chinos asegura que la lentitud de su computadora le cambió el humor durante todo el día. Lo mismo dijeron un el 25% de los encuestados franceses y el 20% de los italianos.
Y, volviendo el principio de este texto, este malestar que genera perder tiempo parece que también tiene repercusiones sobre los equipos. El 23% de los alemanes entrevistados confesaron haber maltratado a la PC debido a la lentitud. En España, China y EE.UU. este número desciende a 17%, pero no deja de ser significativo.